En las inmediaciones de la melancolia

Dejo magulladuras

Heridas del fondo de mí ser

Obsequio del destino

Soplo de fantasías insatisfechas

Olvido de la providencia

Viviendo en el contado de la desesperanza

Una evidencia difícilmente ocultada

Por una falsa de alegría

Suspiros de lágrimas mudas

En medio del silencio

Me quedo en pie

A lado del río

Escucho el agua

Corriendo sobre las rocas

Caricias suaves

También sus susurros del placer

Sensual

Enfusando a los tiempos

En los inmediaciones

La sombra de una quietud

Imperturbable

A pesar el corriente del viento

Intento  anestesiarme

De rasguñas abiertas

Profundas en la carne

Del corazón

Cuyos gritos hunden en el vació

De la vagabundeo y

De la soledad

Derrumbando el sentido humano

Transformándolo

En una partitura

De la melancolía

Y de la nostalgia

Labios cerrados

Ninguna palabra

Saltara de la boca

Pesara sobre la lengua

Soportando

De llevarla

Hasta que la confesión

Sea permitida

Y  el sonido resonara

En el fondo de la existencia